LA VANGUARDIA - 03:46 horas - 26/03/2004

El pasado 1/III/2004 Xavier Sala i Martín, prestigioso economista, utilizó la ventana que le ofrece “La Vanguardia” para cargar contra el último informe de la pobreza que hemos elaborado bajo los auspicios de la Fundació Un Sol Món. La crítica no nos molesta. Al contrario, como académicos, entendemos que es imprescindible para poder avanzar en el mundo de las ideas. No obstante, para que esto sea posible es necesario que sea razonada, sin demagogia ni falsedades.

Resulta que la crítica de Sala i Martín está plagada de incorrecciones. Señalemos sólo un par de ellas. En nuestro trabajo no cambiamos misteriosamente la definición de la pobreza para el 2000, simplemente la ajustamos a las nuevas directrices marcadas por la UE. El comparar las cifras de 1996 y el 2000 es un grave error metodológico del que Xavier Sala i Martín es perfectamente consciente. Así pues, las conclusiones de su artículo son erróneas.

No deja de ser curioso que el que denuncia flagrantes distorsiones de la realidad acabe siendo ¡el que más la distorsiona! Pero de nuevo la vieja máxima se cumple: siempre hablan los que más deberían callar. Él tampoco se leyó nuestro informe antes de destrozarlo y poner en tela de juicio nuestra integridad profesional al llamarnos ¡tergiversadores que sembramos la confusión!

Las nuevas realidades de pobreza en Catalunya merecen un análisis más profesional y responsable.
MAGDA MERCADER
XAVIER RAMOS
Prof. dept. Ec. Aplicada (UAB)
Bellaterra