Capítulo 1: La Ilustración en España e Hispanoamérica (siglo XVIII)

La Revolución Francesa

Comenzada en 1789 con la toma de la prisión de La Bastilla, marcó el derrocamiento del rey Borbón Luis XVI, el fin del Antiguo Régimen en Francia y el establecimiento de un régimen basado en los principios de "Libertad, Igualdad y Fraternidad" entre los ciudadanos. La Revolución Francesa constituyó el primer régimen democrático instaurado en un país europeo; la primera ocasión en que un rey era enjuiciado como un simple ciudadano, condenado a muerte y ejecutado (junto con toda su familia); el primer caso de un Estado que se empeña activamente en extender los principios democráticos a las demás naciones mediante propaganda y acciones militares; y también el primer caso moderno de terrorismo de estado: los sucesivos gobiernos persiguieron y ejecutaron en la guillotina a docenas de miles de oponentes, disidentes y sospechosos. Tras este período del "Terror", el general Napoleón Bonaparte tomó el poder y rápidamente transformó el régimen en un imperio invadiendo buena parte de Europa, incluida España, hasta ser vencido por una coalición de monarquías europeas en 1814. A pesar de los claroscuros y atrocidades de la Revolución, la Declaración de los derechos del Hombre y el Ciudadano (1789), su principal documento oficial, es considerada una de los más importantes documentos sobre los derechos humanos y las libertades individuales que ha producido la humanidad, y fue uno de los textos más influyentes en el ideario de los independentistas latinoamericanos.